lunes, 24 de julio de 2017

!!!!!Entendiendo las leyes de la física!... de la física resistencia al cambio de toda la raza humana!!


Como muchos saben, mi trabajo se enfoca a transformaciones empresariales impulsadas por la tecnología y la adopción de nuevos métodos de trabajo. Como ingeniera en sistemas estudie muchas materias enfocadas en matemáticas, físicas…. Pero definitivamente hasta ahora entendí el significado de la fuerza de resistencia.
No existe un ser más complejo que el humano, y cuando se habla de cambio, deja ver sus peores temores externados como comportamientos que los hacen verse lejos de un nivel de profesionalismo esperado en los niveles empresariales y más aún en los “altos” niveles ejecutivos. Hoy quisiera hablar un poco de aquellas personas que escudadas en actitudes toxicas esconden sus más grandes temores al cambio y sobre todo expondré las razones principales por las que estos temores absorben la racionalidad de los seres humanos.

¿Por qué le tememos tanto al cambio?: Es natural en los humanos sentir este gran temor, y es que aunque se han estudiado las fobias a las alturas, estar encerrado, salir a la calle y que se yo, cuanta fobia existe, poco se habla de la fobia al cambio. Desde pequeños la sufrimos, no es algo que suceda con el tiempo, es algo con lo que nacemos. Recuerdo mi primer día de colegio, el temor que tenía a desapegarme a mis padres y quedarme en un lugar desconocido, porque lo desconocido nos aterroriza. Sucede lo mismo cuando nos cambian de colegio, cambiamos de ciudad, y conozco a personas que les aterra hasta el sencillo hecho de cambiar su rutina, la marca de ropa o shampoo, y jamás consideran pedir un plato distinto en su restaurante favorito.
En mi análisis, existen varias razones por las que nos resistimos al cambio:
1.       Autoestima: Las personas se sienten tan incapaces de cambiar, de aprender algo nuevo. Tienen tan poca fe en ellos mismos que el cambio solo pueden verlo como una amenaza, una situación, un aprendizaje al que no podrán adaptarse, y finalmente, esa inseguridad se traduce en negativa al cambio.
2.       Desconocido: Como mencionaba al principio, los humanos tenemos una obsesión por el control y por la certidumbre. Un cambio trae mucha incertidumbre, lo que genera resistencia al cambio. Las personas sienten tanto miedo a enfrentar algo nuevo, que actúan de manera repelente, en algunas ocasiones de manera inconsciente.
3.       Pereza: Esta es la más común en nuestra región, aunque no lo creamos. Las personas sienten este temor al cambio porque les significara aprender cosas nuevas, practicas, labores, adaptarse a nuevas condiciones, eso al final en la mente del empleado se traduce en más trabajo, y por lo tanto da pereza. Lastimosamente hemos sido criados en una cultura en la cual el ya llevar bastantes años sentados en un puesto nos asegura la permanencia en el mismo, sin seguirnos preparando o esforzando, terrible enseñanza, por las nuevas generaciones llegan rápidamente a desbancarnos.
Los puntos anteriores no son un juicio, es una descripción de lo que los humanos sentimos cuando vemos un gran cambio cerca, y digo los humanos porque yo también lo siento. No porque trabaje en innovación y cambio constante no siento los mismos miedos, por lo que lo primero es NO juzgar a quienes asumen esta posición, pues todos hemos sido detractores de algún cambio. Lo segundo es identificar a quienes están sufriendo en mayor manera de este mal para dedicar nuestra atención a ellos, por eso es importante identificar las actitudes toxicas.
Actitudes toxicas de resistencia al cambio:
1.       Rumor de pasillo: Famosa frase cuando el rio suena piedras lleva, bueno pues quien esta haciendo sonar el rio, miedos lleva. Este tipo de actitud es de una persona que no acepta el cambio y además quiere buscar seguidores, por lo que lanza información conveniente y observa receptores interesados en los que puede sembrar la semilla que ya tiene florecida en su mente de resistencia. Busca seguidores porque no quiere ser el único que está en contra y porque tampoco quiere expresarlo, busca encontrar un aliado que haga el trabajo sucio por él.
2.       Silencio resistente: Esta es de las actitudes más difíciles de identificar y necesita de experiencia. Es fácil identificar a aquel que anda rumorando en los pasillos, tarde que temprano encuentra un oído que repele el mensaje y transmite la situación a los encargaos del cambio. Pero aquellos que no expresan nada, y, sobre todo, no expresan su resistencia son como pequeños niños listos para inmolarse en el momento adecuado, esperando con rostro de ternura el momento de explotar. Nunca opinan, y regularmente tampoco lideran ninguna actividad, solo se sientan en silencio a observar y esperar su momento. Más adelante compartiré algunos tips para manejar este tipo de resistencia.
3.       El control: Son fácilmente identificables quienes caen en esta práctica, sobre todo, porque lo hacen de frente. Son los que menos conscientes son de su actitud resistente porque creen que simplemente están haciendo su trabajo. Aquella actitud que intenta controlar todo lo que esta sucediendo con el cambio y hacer parte de el por imposición. Aquellas personas que quieren hacer parte de todo, estar informadas de todo y sobre TODO autorizar cada movimiento. Cuando no encuentran como controlar directamente, usan áreas externas o entidades para justificar su resistencia, ejemplo, usan auditorias, normas y hasta regulaciones, u órdenes de sus jefes, para sustentar su deseo de controlarlo todo. Áreas que frecuentemente entran en este punto son las de recursos humanos.

Algunos consejos prácticos para enfrentar estas situaciones, y tratar de salir vivos del duro trabajo de ser agentes de cambio (si están leyendo esto significa que sigo viva):

1.       Identifica los resistentes y su estilo de resistencia: Siempre debes identificar los roles claves para el éxito del cambio que están en resistencia, entenderlos NO juzgarlos y sobre todo entender el tipo de resistencia que están generando para tratarlo de la mejor manera.
Si son resistentes de pasillo: Identifica tus sponsors, ellos serán los que ayudaran a acallar los rumores, lo que tú digas no hace diferencia, recuerdas, eres el que llego a cambiar lo bien que estaban. Pero esos sponsors que debes identificar te ayudarán a contrarrestar el ataque negativo y a permitir que se conviertan al lado oscuro los menos posibles

Si son resistentes silenciosos: Dales un papel protagónico, hazlos sentir importantes, parte del cambio, y sobre todo responsables. Cuando les asignas una tarea específica no podrán seguir guardando silencio, porque ellos tendrán parte de la responsabilidad. Eso permitirá que dejen conocer sus miedos, pero, sobre todo, que se conviertan en promotores del cambio una vez sientan la pertenencia al proyecto.
Si son resistentes controladores: Sin ser conflictivo pídeles las evidencias. ¿Si la ISO dice eso, me puedes permitir ver donde lo dice para poder adaptar mi proceso? Ese tipo de solicitudes desequilibran a este tipo de controladores. Pero, además, debes de dar muestra de resultados reales, tangibles, que les permitan entender que su control solamente está imposibilitando el avance y sobre todo que vean que se están quedando atrás. Cuando entiendan la dinámica de lo que estás haciendo es momento de darles importancia, pero primero ya debes tener algunos resultados que mostrar, de lo contrario, se unirán a ti solo para detenerte.


Finalmente debo decirles que como todo en la vida es imposible tener feliz a todo el mundo, debes aceptar renunciar a un porcentaje de personas que simplemente jamás se adaptaran, no se preocupen, ellos encontraran su lugar en el mundo, pero definitivamente su lugar no es donde están ahora, porque donde están, como todo, dejara de existir y se transformara con el tiempo. Además, recuerden siempre, a sus detractores, deben confrontarlos, como dice el refrán, al toro por los cuernos, pero con inteligencia, identificado los puntos anteriores, eso les asegura una confrontación positiva que ganaran.

lunes, 17 de julio de 2017

Enfréntate a proyectos que no terminan siendo exitosos

En una entrada pasada toque puntos sobre los proyectos de tecnología, algunas claves para alcanzar el éxito de las implementaciones desde mi experiencia personal. Pero eso no asegura que todos los proyectos que se ejecutan serán exitosos, es más, yo en mi vida profesional he participado y liderado proyectos que no han terminado como se esperaba, o en algunos casos no han terminado, y el que diga lo contrario dudo mucho que trabaje en tecnología, o si trabaja en tecnología, se ha mantenido dentro de su zona de confort implementando pequeños proyectos que no han logrado la transformación que proyectos en nuestro rubro deberían de alcanzar para llamarse exitosos.
Y es que el fracaso es muy difícil de manejar, y sobre todo para nosotros los ingenieros que nos creemos súper poderosos, invencibles, los más poderosos que solo tenemos a Dios sobre nosotros. Bueno pues déjenme contarles un poco sobre fracasos, porque en la vida de los proyectos como en la vida cotidiana todos fracasamos en distintas iniciativas, y esto puede convertirse en la cruz que acabe nuestra vida o en el fuego que la alimente. Personalmente me he enfrentado a varios fracasos en todas las ramas de mi vida, en mi vida como pareja, en algunas situaciones de mi bienestar y salud, así como en mi vida profesional, por lo que sé que los sentimientos y esquemas que cada uno de nosotros aplica para enfrentar estos desafortunados o afortunados momentos son en su raíz iguales.
Para explicar de una forma adecuada mi punto en esta entrada, les comentare algo que para la mayoría de personas que me conocen y seguro son quienes me leen (Gracias por eso), desde hace algunos años sufro de una condición conocida como alopecia areata. Esta condición básicamente hace que perdamos el cabello en algunos casos de todo nuestro cuerpo (Mi caso). Aunque leerlo suena como algo tan poco importante, enfrentar esta situación para una mujer es un verdadero fracaso, fracaso contra el estándar de belleza que debemos cumplir, no se imaginan cuantos artículos publican en Facebook mencionando lo importante que es el cabello para conseguir pareja, porque a los hombres les encanta el cabello de las mujeres, porque el cabello es lo que nos define en nuestro género, y hasta personas, muchas conocidas mías que reniegan por su cabello, si tan solo supieran lo que es simplemente NO tenerlo. Bueno enfrentar esto en mi vida personal no fue sencillo, y es el mismo proceso que se vive durante los proyectos, durante todas sus fases, que mejor que usar esta analogía para describir el paso a paso y, sobre todo, aprovechar para darte algunos consejos para salir vivo de esa experiencia, que nuevamente, pueden ayudarte tanto en tu vida profesional como personal:

1.       Los síntomas escondidos: Lo primero que siempre notaras en un proyecto que está perdiendo su rumbo es un síntoma, pequeño, a veces aislado y que lastimosamente debido a las múltiples actividades en las que estamos inmersos, el ruido y nuestra falta de atención a los detalles, pasamos por alto. Mi primer síntoma de alopecia no lo identifique yo, fue en realidad la persona que una vez a la semana arreglaba mi cabello. Una pequeña circunferencia en el lado izquierdo de la cabeza, justo sobre la oreja estaba sin cabello, plana, era del tamaño de una moneda de 25 centavos de dólar.
En los proyectos, muchas veces suceden pequeñas cosas, una estimación de tiempo o costo que no se cumple, la renuncia de alguna persona del equipo, chismes de pasillo sobre el proyecto o los entregables, son pequeñas cosas que el líder de proyectos simplemente desconoce y regularmente no nota, es más, la mayoría de veces son las personas fuera del proyecto las primeras que honestamente notan que algo no está bien.

2.       Síndrome de súper héroe: La segunda fase y que considero tal vez la más difícil, es aceptar que algo está mal cuando las señales se hacen más evidentes y no puedes seguir negándolas o simplemente dejándolas pasar de alto. Después de mi descubrimiento de ese primer círculo en mi cabeza, empecé a notar los cabellos en las mañanas sobre mi almohada, eran cada vez más, y no podía seguir negando que algo estaba pasando y no podía detenerlo. Sin embargo, seguía pensando que era algo temporal, un cambio hormonal que se yo, por lo que me negué a aceptar lo que era evidente para todos. En los proyectos, siempre encontramos culpables o situaciones especificas o alguna excusa para explicar estas primeras señales de problemas, pero si tan solo dejáramos de ser súper héroes y nos dejáramos ir por la verdad y por la debilidad que todos los seres humanos tenemos, porque quienes ejecutan proyectos somos seres humanos, no maquinas. Entre más rápido aceptemos el problema y corrijamos mucho mejor.

3.       La derrota: Finalmente llega el momento de la sinceridad. Aquel momento en que nos miramos en un espejo a nosotros mismos o a nuestros equipos y evidenciamos que en realidad hay un problema, más allá de una pequeña casualidad o una temporalidad, es un problema real, algo está pasando y sabemos poco sobre las causas, solamente sabemos que pone en riesgo nuestro proyecto. Recuerdo aquel día que amanecí con tan poco cabello que ya no podía ocultarlo detrás de las pequeñas hebras que se aferraban con sus últimas fuerzas a mi cuero cabelludo. Ese día fue la primera vez que llore, desconsolada me mire al espejo horas tratando de entender que sucedía, porque me estaba pasando esto, busque culpables, busque curas milagrosas en el internet, me llene de información y al final del día termine más vacía de lo que empecé. Cuando finalmente tenemos la conciencia de enfrentar un serio problema en nuestros proyectos, así como en la vida real tenemos dos opciones, quedarnos en ese primer día, congelados sobre el evidente problema que apremia nuestro proyecto, buscar soluciones rápidas, contratar recursos para aumentar la capacidad, buscar curas mágicas, que seguramente solo nos hundirán más en el fracaso, o pasar un momento de aceptación y rabia, dolor e impotencia, para luego convertir todo eso en motivación que nos permita buscar realmente la causa raíz del problema y solucionarlo, no será perfecto, pero al final será lo que esperabas. 
4.       Afrontar: La decisión de dejarse morir, de renunciar a todas las cosas que aún se pueden hacer por el problema que se afronta, es este tal vez el momento más importante. Se decide si lo que sucede hará que seas aún más fuerte, o por el contrario será el fin de todo lo que se ha avanzado hasta el momento. Aquel día recuerdo estar sentada en el espejo mirando mi cabeza, tratando de tapar los espacios sin pelo, pasaba horas tratando de ocultar lo que era evidente, era imposible mantenerlo escondido, y además era frustrante.  Era momento de tomar una decisión radical, de re inventarse desde lo sucedido, desde el aprendizaje. Ese fue el día de quitarme todo el cabello, comprar una peluca y seguir para adelante.  Cuando los problemas de un proyecto ya no pueden cubrirse, cuando no hay recursos, horas extra o inversiones que puedan ocultar la realidad del resultado esperado del proyecto, es momento de afrontar, de con sinceridad aceptar lo que está sucediendo y enfrentar el problema desde una perspectiva diferente. Al final esto permitirá identificar otras fortalezas del proyecto que tal vez no estaban claras al principio, y pueden darle un nuevo rumbo que termine dándole más exitoso que cuando seguía su trayecto normal. La oportunidad de replantearse el proyecto o tu vida misma, solo se da una vez, y de cómo decidas afrontarlo se determinará el camino hacia adelante del proyecto.

5.       Aprendizaje y renovación: Olvidé mencionar que siempre tuve un cabello rebelde, crespo (colocho), era difícil de peinar, y en realidad era feo, muy feo. Si es cierto que, en este momento de mi vida, ese pelo feo sería una bendición para mí, pero también es cierto que la alopecia me ha permitido cambiarme el look, tener cabellos lindos, cortos, largos, rojos y pintados. Así son los proyectos, de la adversidad, y después de pasar todos los pasos anteriores, finalmente logras ver un resultado mejor que el que se planteó inicialmente, terminas construyendo algo mucho más grande, más acertado, con un mayor impacto para la organización.

Todo depende de cómo enfrentas cada etapa, de cuanto te preparas para el fracaso, la educación nos prepara para ser exitosos, pero no para cuando no lo seamos, y TODOS fracasaremos tarde que temprano. El cómo vives cada paso, la velocidad con la que reaccionas, te adaptas, cambias y construyes sobre las dificultades mejores finales hacen la diferencia entre un buen administrador de proyectos y uno del montón, entre un profesional exitoso y uno mediocre, entre una persona exitosa y una persona negativa enfrascada en sus problemas

Feliz Semana!!!